Qué significa mise en place y cómo hacerla correctamente

Tener todo en orden en la cocina supone un increíble ahorro de tiempo, de espacio y de problemas, sobre todo cuando preparamos grandes comidas o cenas. Una buena organización de los ingredientes y los utensilios de trabajo es un aspecto clave en el éxito del menú. La preparación mise en place es sinónimo de trabajo sin agobios y como todo un profesional.

¿Qué significa el concepto mise en place?

La eficiencia en la cocina no se mide únicamente por las capacidades culinarias de quien se pone al mando de los fogones. Ser un buen cocinero también implica planificación y organización en el espacio de trabajo.  

El término francés mise en place (MEP) se emplea para referirse a todas esas técnicas de preproducción de un plato que te van a permitir trabajar con orden, rapidez y eficiencia. En la cocina profesional sería impensable hablar de un buen trabajo como chef sin tener en cuenta estos aspectos de organización.  

Esa búsqueda de la perfección no se limita a la cocina. La mise en place es un concepto que también se aplica a la correcta disposición de una mesa para que todo ocupe el lugar que le corresponde. Es el amor por la comida llevado a otro nivel: el de lo excepcional.  

Consejos para una mise en place perfecta

Mise en place a la hora de cocinar

Una correcta mise en place en el espacio de trabajo no te llevará más de unos minutos. Es un proceso sencillo con el que ganarás tiempo durante la preparación de tus recetas, sin sobresaltos de última hora, para que puedas dedicarte por completo a tu menú.  

  • Asegúrate de que dispones de todos los ingredientes necesarios para la receta que vas a cocinar. Parece obvio, pero siempre hay que trabajar sobre seguro.  
  • La precisión es otro aspecto fundamental. Si tu receta implica medidas exactas (como suele ocurrir con frecuencia con la preparación de tartas y bizcochos) pesa todos los ingredientes antes de ponerte manos a la obra.  
  • Lavado, pelado, troceado… Dale a cada ingrediente el tratamiento que necesite y resérvalo ya listo para su uso hasta que llegue el momento de integrarlo en la receta.  
  • ¿Qué utensilios vas a necesitar? Tablas, cuchillos, sartenes o cacerolas. Es mucho más cómodo dejarlo todo preparado para no tener que andar buscando las herramientas de cocina en estantes y cajones cuando ya estás con las manos en la masa.  
  • Las especias y el aceite siempre accesibles. Reserva un lugar de la encimera para disponer de las especias y condimentos que vaya a requerir tu receta. De este modo no te olvidarás de añadir ninguna.  

Mise en place al montar la mesa

La experiencia foodie no se completa hasta que no te sientas en una mesa perfectamente dispuesta para disfrutar del menú. El concepto mise en place se puede aplicar también a esos detalles que hacen que tu mesa sea un lugar especial en el que disfrutar de la comida.  

  • ¿Con mantel o sin mantel? Una mesa clásica siempre lleva mantelería mientras que los ambientes más informales pueden presentar una mesa desnuda o con manteles individuales.  
  • Cubertería, vajilla y cristalería tienen que ser acordes al estilo de tus creaciones culinarias. Pero más importante que eso es que todo esté limpio y reluciente en el momento de sentarse a comer. Repasa cada pieza durante el montaje de la mesa para recibir a tus comensales como se merecen. Todo debe estar ordenado y alineado como marca el protocolo.  
  • ¿Te suena el término petit menage? Es el conjunto de pequeños utensilios y accesorios que puedes necesitar durante la comida. Salseros, mantequeras, molinillos, vinagreras… A la hora de comer toda la concentración debe estar en lo que tienes en el plato, no en un constante ir y venir de la cocina.